8 cosas que las personas socialmente inteligentes nunca hace

Las personas socialmente inteligentes cumplen una serie de características que les permiten destacar por encima del resto. Saben cómo comunicarse, tanto física, como emocionalmente.

Y es que la verdadera inteligencia social proviene de la confianza y la compresión que tienes de ti mismo, permitiéndote llegar a un punto en el que puedes interactuar con los demás de manera madura y efectiva.

Profundicemos.

¿Cómo son las personas socialmente inteligentes?

1. Nunca interrumpen al interlocutor

Las personas socialmente inteligentes suelen ser excelentes compañeras de conversación. Ellas no sienten la necesidad de tener que hablar antes que otra persona, ni de interrumpir cuando el otro está contando algo importante.

Simplemente, esperan con tranquilidad su turno para intervenir. No tienen la ansiedad de imponer por la fuerza su punto de vista porque están seguras de su postura.

Saben que no es necesario exponer su opinión antes que los demás para que esta tenga valor.

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2. No se enfocan siempre en sí mismos

Las personas socialmente inteligentes saben que son importantes y trabajan para mejorar y avanzar. Entienden que sus relaciones interpersonales requieren de su atención y tiempo, por lo que definen hábitos y costumbres para con sus amigos, pareja y familia, pero también, para con ellos mismos.

Tienen la capacidad de comprender que no son el centro del mundo sin dejar de sentirse valiosos. Son la clase de personas que estarán a tu lado cuando necesites su apoyo, pero que sabrán decir “no” cuando sea necesario.

3. No juzgan a los demás para demostrar que tienen razón

Una buena señal de madurez emocional e intelectual es entender las diferencias que se pueden tener con los demás. Al juzgar a otras personas con el fin de imponer unas ideas u opiniones personales sobre algo, solo se evita que la gente se sienta cómoda y quiera compartir su punto de vista.

Lo ideal es ser una persona más abierta y receptiva, sin necesidad de tener la misma opinión que los demás.

4. No buscan cambiar la opinión de otros

Esta es una gran habilidad de las personas socialmente inteligentes. Los sentimientos de los demás son eso, sentimientos. Por esta razón es importante que te dirijas a ellos con respeto y paciencia.

Cuando se comprende de manera madura la opinión de los demás y se pueden exponer las opiniones con respeto, las situaciones se tornan más saludables, productivas y pacíficas.

No necesitas hacer que los demás se sientan inferiores para demostrar que tus opiniones también son importantes.

5. Son calmados y saben utilizar su voz

Ser asertivos es realmente la mejor manera de lidiar con los problemas que debas afrontar en la vida. La ira y la agresión pasiva disfrazada de asertividad suelen traer más problemas que soluciones.

Las personas socialmente inteligentes tienen la seguridad de expresar lo que quieren. Saben que escuchar y participar en una conversación con confianza y un propósito es la manera correcta de relacionarse con los que les rodean.

6. Son menos críticos

Muchas personas que se autodenominan «antisociales» tienden a criticar constantemente a los de su alrededor e, inclusive, a sí mismos.

Las personas socialmente inteligentes suelen aceptar que todos, sin importar lo que aparenten en el exterior, tienen muchas cualidades, tanto positivas como negativas para ofrecer.

Aquellos que saben relacionarse con los demás sacan el mejor provecho tanto de sus conductas, como de las externas. Esto se debe a que tienen un grado mayor de confianza en sí mismos y buscan aprovechar cada situación que se les presenta.

7. No analizan demasiado cómo interactúan con los demás

Pensar demasiado en cómo son tus relaciones impide que las disfrutes. Por ello, es importante que evites predisponerte a cómo serán tus interacciones con las demás personas.

Puedes volver esta costumbre a tu favor si, en lugar de enfocarte en todos los posibles malos resultados, encaras tus interacciones con una actitud positiva. Incluso cuando se trata de relaciones donde las cosas no han salido del todo bien, podrías sorprenderte.

8. Tienen un buen lenguaje corporal

Cuando te encuentras en alguna relación social, la posición en la que está tu cuerpo envía un mensaje a los demás. Las personas socialmente inteligentes se aseguran de que el mensaje que su cuerpo envía sea positivo.

Cuando haces contacto visual con los demás y sonríes, demuestras a los demás que eres amable, abierto y para nada intimidante. Si, además de esto, te colocas en una postura recta, los demás notarán que eres una persona segura.

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Las relaciones deben ser recíprocas

Esperar a que los demás hagan contacto contigo y te inviten a actividades es perder el tiempo. Las personas socialmente inteligentes saben que las relaciones sociales se basan en un esfuerzo mutuo.

Si quieres demostrar a los que te rodean que te importan, debes tomar la iniciativa y poner de tu parte para conectar con ellos. Esto puedes hacerlo simplemente si:

• Mantienes el contacto mediante llamadas o textos.
• Visitas a tus amigos.
• Organizas alguna reunión.

Aunque algunas personas nacen con una inteligencia social más desarrollada, cualquiera de nosotros puede perfeccionarla si presta la atención necesaria. Al final, solo se trata de poner en práctica estos simples hábitos.