Pregabalina: ¿para qué sirve?

La pregabalina es un principio activo utilizado, sobre todo, en el tratamiento del dolor neuropático y las convulsiones. En cuanto a estas últimas, se ha demostrado que la pregabalina reduce la frecuencia de aparición de las convulsiones de inicio parcial cuando se administraba como tratamiento coadyuvante.

A lo largo del artículo veremos las características principales de las patologías para las que está indicado este principio activo, así como las características generales del mismo.

Mecanismo de acción: ¿cómo ejerce la pregabalina el efecto en el organismo?

La pregabalina es una sustancia análoga del neurotransmisor inhibitorio del sistema nervioso central por excelencia, el GABA. El GABA, al igual que otros neurotransmisores, es una sustancia química que se sintetizan en el organismo y que se encarga de la transmisión de señales desde una neurona a la contigua.

Según se una a un receptor u a otro, se desencadenarán unas u otras acciones en el organismo. La activación del receptor GABA-A, que es el que predomina en el cerebro, conlleva a la reducción de la actividad neuronal, lo que justificaría el efecto anticonvulsivo de la pregabalina.

Sin embargo, todavía no se sabe muy bien cuál es el mecanismo exacto de la pregabalina, ya que no hay indicios de que se una ni con los receptores GABA-A ni con los GABA-B. Tampoco afecta a la receptación de este neurotransmisor.

¿Para qué enfermedades sirve la pregabalina?

Como ya sabemos, la pregabalina está indicada, entre otras enfermedades, para el tratamiento del dolor neuropático. También está indicada en combinación con otros medicamentos para el tratamiento de las epilepsias, sobre todo en las convulsiones de inicio parcial.

Aprendiendo sobre las epilepsias

Las epilepsias son consecuencia de un trastorno del sistema nervioso central. Se producen porque la actividad  del cerebro no funciona como es debido y produce unas descargas que generan convulsiones. Si no se tienen en cuenta las medidas de tratamiento y de prevención adecuadas, las convulsiones pueden resultar mortales.

Los síntomas  y la forma en la que se desencadenan varía de una persona a otra. Además, todo el mundo puede padecer esta enfermedad. No obstante, si una persona  ha sufrido un tipo de epilepsia, si le vuelve a ocurrir, lo más probable es que sea del mismo tipo, aunque no siempre es así y los síntomas pueden variar.

No obstante, para que un médico te diagnostique como paciente epiléptico, tienes que haber sufrido por lo menos dos convulsiones no provocadas.

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¿Qué es el dolor neuropático?

Se trata de una patología que afecta al 7-10 % de la población europea, aproximadamente.  Estos pacientes describen el dolor neuropático como un dolor de tipo punzante y quemante. Además, a veces sienten una especie de hormigueo y palpitaciones en diferentes partes del cuerpo.

Se trata de un dolor que se produce por que el sistema nervioso no funciona de manera óptima. De este modo, este sistema interpreta los estímulos de forma anómala, desencadenando dolor por estímulos que no deberían causarlo.

Esta enfermedad suele alargarse en el tiempo apareciendo de forma intermitente. Sin embargo, aunque pueda aparecer de forma espontánea, hay unas situaciones que favorecen su aparición, como lo es haberse sometido a una cirugía, haber tenido una infección o después de un traumatismo.

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Reacciones adversas

Al igual que todos los medicamentos en el mercado, la pregabalina también puede producir una serie de reacciones adversas que deben tenerse en cuenta a la hora de iniciar el tratamiento con este medicamento.

Entendemos reacciones adversas como todos aquellos eventos indeseables y no intencionados que se esperan con el tratamiento con un medicamento. En este sentido, las reacciones adversas más reportadas en los ensayos clínicos con este medicamento fueron:

• Mareos.
• Somnolencia.
• Trastornos psiquiátricos.
• Alteraciones sanguíneas.

Conclusión

La pregabalina es un fármaco que se utiliza sobre todo para tratar el dolor neuropático y las epilepsias. Se trata de una sustancia análoga al GABA, un neurotransmisor inhibitorio del sistema nervioso central.

Sin embargo, no se conoce con precisión el mecanismo de acción por el cual desencadena su efecto en el organismo, ya que no interacciona con los receptores de este neurotransmisor.

Te recomendamos que te informes bien sobre la administración de este medicamento, así como los posibles efectos adversos que puede producir. Además, recuerda seguir siempre las instrucciones de uso que te indique el médico.