4 consejos para hablar con tu hijo adolescente

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Jun 30, 2020   Maternidad

Hablar con tu hijo adolescente no es tarea fácil. Generalmente los padres tenemos problemas para comunicarnos con ellos en esta etapa, simplemente porque hablamos lenguajes diferentes. Sin embargo, debes llenarte de paciencia y guiarlos hasta donde sea posible.

Cuando tu hijo se enfrenta a un problema, debes orientarlo, pero dejando que lo resuelva solo. La capacidad que ellos tienen de razonar deben ponerla en práctica. Analizad juntos el problema y deja que sea tu hijo quien encuentre la solución.

Luego dile alguna frase alentadora como: “Piensa un poco sobre lo hablado y luego toma la decisión que tú consideres y recuerda que debes asumir las consecuencias responsablemente.”

No se trata de «dejar hacer», se trata más bien de sugerir y orientar con mucha mano izquierda. Debe parecer que es el propio adolescente quien llega por si solo a la solución.

 Consejos para hablar con tu hijo adolescente

En la adolescencia las personas experimentan cambios físicos, psicológicos, hormonales y sociales. Trayendo como consecuencia que la comunicación con los padres sea bastante compleja. Estos cambios los llevan a desear hablar más con amigos de su misma edad y en muchas ocasiones escuchan consejos errados que los pueden hacer fracasar.

Por tal motivo, a continuación damos algunos consejos para que los pongas en práctica al momento de hablar con tu hijo adolescente.

1. Sé razonable y mantén la posición

Madre hablando con su hija.

Los adolescentes saben cómo convencer a sus padres para lograr sus objetivos. Es cierto que cuando los padres ceden ante un castigo pueden resolver el problema temporalmente. Pero al contrario, con esta actitud les están demostrando a su hijo que mientras insista los padres van hacer lo que él quiera, por ello, debes mantener tu posición.

Sin embargo, hay que ser razonable y dejar que tu hijo exponga los motivos por los cuales rompe una regla. Por ejemplo, sugerirle que solicite permiso para llegar más tarde a casa de la hora establecida en la norma. En este caso si accedes y dices que sí estarás siendo razonable y no cederás a una insistencia.

Para reforzar esta norma, se recomienda reunir a la familia para hablar de las reglas, específicamente del horario establecido para llegar a casa. También debéis evaluar todos los factores antes de tomar una decisión. Así se le demuestra al adolescente que los padres están dispuestos a ceder si no se viola ninguna regla.

2. Sé asertivo

Madre e hija hablando.

Ser un padre asertivo es de gran ayuda porque tendrás la capacidad de defender tus derechos y expresar tu opinión, sin ofender a tus hijos ni permitir que ellos te ofendan. Logrando a través de la palabra mediadora una negociación donde ambas partes queden satisfechas con los resultados.

Al asumir una actitud asertiva frente a tu hijo hará que aumenten las posibilidades de conseguir el objetivo que deseas. Y el adolescente se sentirá más tranquilo y seguro porque sabe que sus padres lo escuchan, también que sus opiniones y sentimientos cuentan para ellos.

Es muy importante ser muy sinceros, no dar sermones («yo a tu edad…»), escuchar cómo se sienten. Ellos están en otra fase de la vida. Tal vez no entendamos que problemas, para nosotros sencillos, para ellos pueden llegar a suponer un mundo. Por ejemplo: qué piensan los demás, la popularidad, salir con la chica/chico que me gusta…

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 3. Habla siendo un buen ejemplo

No hay norma, manual ni secretos para hablar con adolescentes. Por esto, se debe tener mucha paciencia, comprensión y dar el ejemplo con la palabra. La mejor manera es comportarse como un modelo ejemplar cuando tengas que conversar con tu hijo sobre un tema que te preocupa.

Los hijos en esta etapa comienzan a madurar en todos los sentidos y viven en una lucha continua para independizarse de los padres. Ellos prefieren estar más tiempo con los amigos dejando en segundo plano a la familia.

Por lo que es recomendable que los padres hagan énfasis en involucrar a los jóvenes de la familia en las tomas de decisiones. Ya sea de algún viaje, compra de algún artículo nuevo, cambios de colegio, planificar una mudanza, etc. Es importante tomar en cuenta su opinión para que todos juntos puedan elegir la mejor opción.

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4. Escoge un lugar y momento adecuado

Madre e hija charlando amenamente.

Si consideras que tu hijo está teniendo un problema de conducta, es indispensable que escojas un momento y lugar donde puedan conversar tranquilamente. Donde no se vayan a presentar interrupciones. Cuando estén relajados, sobre todo tu hijo, pueden comenzar una conversación asertiva.

Inicia el tema describiendo el problema, de una manera sencilla y directa. Se trata de decir cómo te sentiste con el comportamiento que hizo, pero sin juzgar directamente su personalidad. Solo corrige el comportamiento. Tiene que quedar claro que lo que te molestó fue lo que hizo y no su personalidad.

Corregir las primeras faltas es fundamental, no esperes que ocurra esa conducta en reiteradas ocasiones. Así evitarás castigarle y que tu hijo se ponga a la defensiva y no entienda que no lo debe hacer nuevamente

Finalmente, sabemos que no es fácil poder hablar con tu hijo adolescente, y en muchas ocasiones no puedes evitar discutir. En el caso que tu hijo se altere y comience a levantar la voz es vital que mantengas la calma. Debes lograr tranquilizarlo y decirle que cuando esté más calmado continuarán hablando.

Recuerda que los adultos somos los que tenemos que dar el ejemplo. Así, la conversación no perderá el sentido y ganarán ambas partes.