¿Cómo evitar las picaduras nocturnas de los mosquitos?

Las picaduras nocturnas de los mosquitos son bastante molestas. Provocan comezón, hinchazón y, algunas veces, reacciones alérgicas. La hembra es la responsable de los ataques. Utiliza su afilado aparato bucal (probóscide), para extraer la sangre de sus víctimas y favorecer la producción de sus huevos.

Aunque el pinchazo no suele ocasionar dolor, la saliva que desprende el animal genera un verdugón rojo en la piel. Seguidamente, aparecen síntomas como rasquiña, ampollas o erupciones. Sin embargo, el riesgo mayor es el contagio de enfermedades como dengue y malaria, entre otras.

¿Por qué pican los mosquitos?

Los mosquitos abundan en todo el mundo. Se dice que existen unas 3.500 especies, y que cada hembra pone cerca de 3.000 huevos al año.

De allí que la posibilidad de librarse de una picadura sea casi imposible. No obstante, hay personas que (por genética) son más propensas a recibir sus pinchazos. Adicionalmente, hay otros aspectos que inciden en las picaduras.

Quienes usan ropa oscura son más proclives a tener picaduras de mosquitos. Esto se debe a la singular predilección de estos animales por el negro y el azul.

El tipo de sangre también tiene que ver. Estudios sugieren que las personas con tipo sanguíneo O atraen más a los mosquitos que las de tipo A. Interviene además la segregación de sustancias como colesterol, sudor, amoníaco y ácido láctico. Incluso actúa la presencia de bacterias cutáneas y las altas temperaturas corporales.

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Otros factores que atraen a los mosquitos

Los insectos acechan a cualquier hora del día, pero las picaduras nocturnas de los mosquitos son muy habituales. No lo hacen por capricho, ni por casualidad; al parecer, tienen un reloj biológico como los humanos. Eso sería lo que los guía a salir por las noches a buscar su sustento.

Generalmente, los mosquitos se lanzan hacia las personas que emiten mayores cantidades de dióxido de carbono, como los ancianos y las embarazadas. También hacia aquellas que no se bañan, se mueven demasiado, usan perfumes dulces o padecen de exceso de sudoración en los pies.

Los mosquitos no tienen buena vista, pero sí buen olfato. El olor los conduce a su víctima. Y es la predisposición individual lo que determina la intensidad de respuesta a la picadura.

Particularmente en España, las mordeduras de mosquitos no están vinculadas con patologías graves, a diferencia de lo que ocurre en África y Asia.

¿Qué hacer para prevenir las picaduras nocturnas de los mosquitos?

La primera indicación para evitar las picaduras nocturnas de los mosquitos es la utilización de repelentes. A pesar de ser efectivos, su aplicación debe hacerse con precaución. Manteniendo alejadas el área de la boca y los ojos, así como las heridas o las zonas dañadas por el sol. Estos productos no los matan, pero sí los alejan.

Sus efectos suelen durar hasta 8 horas, y se ofrecen en varias presentaciones: espray, toallas, cremas, ungüentos, etcétera. Cualquiera que se elija, debe ser de baja toxicidad, reducidas interacciones y efectividad frente a varias especies.

La instalación de mosquiteras es otra solución. Lo ideal es que sus orificios midan 1.2 mm por 1.2 mm, y que se coloquen en puertas, ventanas y alrededor de la cama. Hay insecticidas ligeros que se pueden rociar sobre ellas para mayor cuidado.

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Otras acciones para repeler a los mosquitos

Nada de lo que se haga para controlar la irrupción de mosquitos en la vivienda es exagerado. Además de picar, estos insectos interrumpen el sueño con su potente zumbido. Con estas medidas, se puede luchar contra ellos sin esfuerzo.

• Llevar pulseras antimosquitos. Su composición de citronela y otros repelentes brinda protección.
• Erradicar el hábitat. En las fuentes de agua estancada se reproducen, así que deben eliminarse.
• Usar atuendo apropiado. Las prendas largas y de colores claros sirven de protección.
• Recurrir a remedios naturales. Cerca de los puntos de acceso y ventanales se pueden disponer plantas o sustancias que ahuyenten a los mosquitos. El vinagre, la albahaca, el eucalipto y el tomillo son aptos para ello. Los enchufes vaporizadores son prácticos y fáciles de usar.
• Mantener la higiene. Aunque suene obvio, es necesario desinfectar las sábanas con agua caliente y aspirar. También es preciso limpiar el cajón de la cama y la cabecera, y fumigar.

Después de las picaduras se recomienda lavar el área, evitar rascarse y colocar compresas frías. Si pica demasiado, se puede tomar un antihistamínico recomendado por el médico. Si se infecta, lo mejor será recurrir al centro de salud más cercano.