¿Los productos químicos de limpieza son dañinos?

En muchas ocasiones escuchamos decir que los productos químicos de limpieza son dañinos para la salud. Algunos elementos como el cloroformo, el formaldehído o el ftalato pueden provocar enfermedades graves en niños, adultos e incluso mascotas. A continuación, veremos una lista de los más perjudiciales y cómo reemplazarlos.

Los datos científicos son concretos y categóricos: más de la mitad de lo que se ofrece en los supermercados y tiendas posee ingredientes nocivos. En especialalergias y problemas respiratorios son la consecuencia de su exposición continuada.

Los productos químicos de limpieza según la ciencia

En 2012, el Environmental Working Group (EWG) realizó un análisis de aquellos líquidos y productos de limpieza más habituales en los hogares. Los resultados fueron alarmantes. Se hallaron cerca de 65 sustancias de alta toxicidad que frecuentemente se asocian a infertilidad, trastornos endocrinos, malestares generales o enfermedades neurotóxicas.

En Noruega, el Departamento de Ciencia Clínica de la Universidad de Bergen, realizó una investigación basada en el seguimiento de 6 mil personas que a diario utilizaban productos químicos de limpieza. En este caso, se hizo hincapié en los daños del sistema respiratorio en personas expuestas a estos elementos tóxicos.

Por su parte, el estudio Nature Climate Change de la Universidad de Harvard ha hecho foco en los daños que estas sustancias implican para el medioambiente en su conjunto. Síntomas poblacionales como la anemia o la carencia de hierro derivarían de la contaminación fruto de los productos químicos de limpieza.

Se suma a este aspecto la Agencia Americana de Protección del Medio Ambiente (EPA). La institución menciona la escalofriante cifra de 150 mil sustancias sintéticas altamente perjudiciales con las que las personas conviven diariamente.

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Sustancias tóxicas presentes en los productos químicos de limpieza

1. Ftalatos: componen productos de limpieza con perfumes sintéticos y su riesgo principal es el de ser disruptores endocrinos. Se los encuentra en lavavajillas, limpiadores para el suelo o los muebles, en el papel higiénico e incluso en elementos de aseo personal.
2. Percloroetileno: presentes en aquellos productos de ‘limpieza en seco’. Este componente puede provocar desde mareos hasta irritaciones respiratorias y oculares, en tanto se considera un agente neurotóxico. Puntualmente, integra limpiadores de alfombras, quitamanchas, etc.
3. Triclosán: característico de los lavavajillas, está prohibido en los Estados Unidos por generar bacterias que resisten a los antibióticos. Por otra parte, es sumamente perjudicial para los ecosistemas naturales.
4. Compuestos de amonio cuaternario (QAC): al igual que el triclosán, se presenta en las etiquetas como un ‘antibacteriano’. Lo cierto es que su uso prolongado puede ser responsable de padecimientos como la dermatitis y alergias respiratorias. Lo encontramos en suavizantes de ropa y desinfectantes varios.
5. Butoxietanol: de la familia de los solventes, se presenta como limpiador multiuso muy eficaz. En la práctica, su uso diario afecta desde los pumones hasta el hígado y los riñones.

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Alternativas para limpiar sin riesgos

En primer lugar, hay que suprimir todos los limpiadores en spray y ventilar la casa por largo tiempo después de una limpieza. Los guantes y mascarillas son, por otra parte, indispensables para no sufrir intoxicaciones.

Todas las precauciones son válidas para evitar que el aire contaminado ingrese en los pulmones o entre en contacto con la piel. No olvidemos que hay muchos trucos eficaces para aplicar en la limpieza en casa.

Los productos químicos de limpieza pueden ser reemplazados sin poner en riesgo la pulcritud del hogar. En realidad, la mejor opción son aquellas alternativas ecológicas libres de tóxicos que se realizan de manera casera. Si la intención es comprar productos de limpieza sin químicos, quizá deba hablarse de una inversión mayor.

Por otra parte, la mayoría del trabajo se puede realizar con un trapo limpio, agua y un poco de jabón. Si no pueden evitarse, es fundamental recordar no usar productos químicos de limpieza en presencia de niños, ancianos o personas vulnerables, como embarazadas.

En conclusión, los productos químicos de limpieza ingresan al organismo por vías respiratoria, piel y ojos, principalmente. De modo que su consumo debe ser responsable, siendo vital mantenerse informados de sus componentes. El consejo final: leer las etiquetas y tener en cuenta la salud.