Articulación del codo

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Jun 30, 2020   Salud

La articulación del codo es la que une el brazo con el antebrazo. Además, posibilita la conexión entre la parte final del húmero y la zona inicial de los huesos cúbito y radio. De hecho, se trata de una estructura compleja que resulta determinante en el movimiento de los brazos.

Las principales funciones de la articulación del codo son dos. En primer lugar, permite que el miembro superior se doble o se estire. Así, esto amplía significativamente las posibilidades de ubicación de la mano en el espacio.

Por otro lado, posibilita que el antebrazo gire sobre su eje. De esta forma, este movimiento aumenta aún más las posibilidades de desplazamiento de la mano.

Estructura de la articulación del codo

articulación del codo

La articulación del codo está compuesta a su vez por tres articulaciones: la húmero-radial, la húmero-cubital y la radio-cubital. Los nombres derivan de los huesos que conectan cada una de ellas.

Las principales características de estas articulaciones son:

  • Articulación húmero-radial. Une la parte más extrema del húmero, que es convexa, con la cabeza del radio, que es cóncava. Además, permite realizar los movimientos de flexión-extensión, pronación y supinación.
  • Articulación húmero-cubital. Conecta el cúbito con el húmero. También posibilita los movimientos de flexión y extensión.
  • Articulación radio-cubital proximal. Une el radio y el cúbito. Asimismo, permite los movimientos de pronación y supinación.

La cápsula articular es una estructura que rodea por completo a la articulación del codo. Es más débil en las secciones posterior y anterior. También presenta unos engrosamientos que limitan los movimientos de separación, aproximación, pronación y supinación. Está tapizada por la membrana sinovial.

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Medios de unión en el codo

articulación del codo

La cápsula articular forma parte de los medios de unión de los distintos componentes que forman la articulación del codo. Además, tiene forma cilíndrica. Aparte de ella, hay un conjunto de ligamentos que también sirven como medio de unión. Son los siguientes:

  • Ligamento anterior. Es delgado y sumamente resistente. Rodea la cara anterior de la cápsula articular.
  • Ligamento posterior. Es delgado y membranoso. Brinda estabilidad a la articulación del codo en la parte posterior. Además, contiene dos tipos de fibras: verticales y transversales.
  • Ligamento lateral interno. Es ancho y bastante resistente. También se conoce como ligamento de Bardinet. Se divide en tres compartimentos: anterior, medio y posterior. Otorga estabilidad y sirve como refuerzo para otros ligamentos.
  • Ligamento lateral izquierdo. Está formado por tres secciones o fascículos: anterior, medio y posterior. Su función es básicamente de refuerzo de otros ligamentos.
  • Ligamento anular. Es una banda fibrosa. Rodea totalmente la cabeza del radio. Así, cumple con la función de permitir que la cabeza del radio se mantenga dentro de la cavidad sigmoidea menor del cúbito.
  • Ligamento cuadrado. También se le llama ligamento de Denuce. Es una banda fibrosa. Se inserta en la zona inferior del cúbito y va hacia la base interna de la cabeza del radio. Hace posible que la cabeza del radio permanezca dentro de la cavidad sigmoidea menor del cúbito. Asimismo, controla el movimiento de prono-supinación.

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Los movimientos del codo

pronación del codo
La articulación del codo está formada por tres huesos: el húmero, el radio y el cúbito.

La articulación del codo permite realizar varios movimientos. Como se había anotado antes, todos ellos contribuyen a multiplicar las posibles posiciones de la mano. Los principales movimientos son:

  • Flexión. Posibilita acercar la cara anterior del brazo y del antebrazo hacia el cuerpo. Exige la participación de estos músculos: bíceps braquial, el braquial superior y el supinador largo o braquiorradial.
  • Extensión. Hace posible que el brazo y el antebrazo vuelvan a la posición normal después de flexionarse. Está limitado por la configuración ósea del codo. Sin embargo, algunas personas pueden realizar la extensión completa. En este movimiento participan músculos como el tríceps braquial y el ancóneo, acompañados de otros músculos complementarios.
  • Prono-supinación. La pronación hace posible que la planta de la mano quede mirando hacia abajo, con el pulgar hacia adentro. Por su parte, la supinación hace posible que la planta de la mano quede mirando hacia arriba, manteniendo el pulgar hacia afuera. En la supinación participan el supinador corto y el bíceps braquial; en cambio, en la pronación, el pronador redondo y cuadrado.

Mientras que las articulaciones húmero-radial y húmero-cubital participan en los movimientos de flexión y extensión, las articulaciones húmero-radial y radio-cubital participan en los movimientos de pronación y supinación. ¡Qué interesante! ¿No?