Claves para perder peso sin pasar hambre

Con la llegada de un nuevo año y tras los excesos durante las vacaciones, son muchas las personas que se proponen perder peso. Ese propósito de Año Nuevo nos surge a la mayoría pero, ¿quién es capaz de perder peso sin pasar hambre?

El mayor problema nace de que la mayoría de dietas son realmente restrictivas y nos hacen pasar hambre. Sin embargo, los médicos y nutricionistas, entre otros, han ido desarrollando extensamente este tema, y han demostrado que existe una forma mejor de hacerlo.

En la actualidad disponemos de numerosos tipos de dietas, entrenamientos y recursos para perder peso. Se estima que casi un 40% de la población mundial tiene sobrepeso, y que desde los años 70 la obesidad se ha triplicado en todo el mundo.

Esto supone un problema no solo a nivel estético, sino que se ha convertido en un problema de salud a nivel mundial. Por ello, en este artículo te explicamos como perder peso sin pasar hambre.

La importancia de perder peso

Actualmente, el número de personas con sobrepeso es muy elevado y sigue aumentando de manera continua. Esto es así porque, en los últimos años, nos hemos ido amoldando a un modelo de vida sedentario y una dieta llena de alimentos procesados y comida rápida muy rica en grasas.

Por mucho que las campañas de salud intentan concienciar a la población, la mayoría de personas solo entienden el sobrepeso como un problema estético. Pero lo cierto es que va mucho más allá, y que tanto el sobrepeso como la obesidad son un problema para la salud.

Ambas condiciones están relacionadas con problemas metabólicos y enfermedades. Se ha demostrado que las personas que sufren sobrepeso tienen una mayor tendencia a sufrir diabetes y mucho más riesgo de tener un problema cardiovascular. Así lo afirma un artículo publicado en la revista «Circulation Research».

Por todo eso, es muy importante encontrar una dieta que nos permita perder peso. Pero no solo se trata de eso, si no que también es esencial mantenerlo y evitar el temido efecto rebote. Del mismo modo, es esencial combinarlo con ejercicio constante y diario.

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¿Cómo se puede perder peso sin pasar hambre?

Para perder peso sin pasar hambre la idea es encontrar alimentos que aumenten la sensación de saciedad, pero que no sean demasiado calóricos. Por ejemplo, no es lo mismo comer una manzana que un bombón. La manzana tiene menos calorías y más volumen, por lo que es más saciante.

De esta manera, en primer lugar es importante introducir en la dieta alimentos ricos en fibra. Se mantienen durante más tiempo en nuestro sistema digestivo antes de ser digeridos. Así el hambre tarda más en asaltarnos, según un estudio publicado en la revista «Advances in Nutrition».

Además estos alimentos suelen tener mucho volumen, pero pocas calorías, como hemos ejemplificado con la manzana. Todas las frutas y verduras nos proporcionan vitaminas, mejoran nuestro tránsito intestinal y aumentan la saciedad.

Por otra parte, también se debe reducir la ingesta de grasas y aumentar la cantidad de proteínas en la dieta. Incluir carnes poco grasas, como el pollo, el pavo o ciertos pescados, puede ayudarte a perder peso sin pasar hambre.

Hay otros aspectos que se suelen tener en cuenta, como por ejemplo, el índice glucémico. Es un parámetro que mide la rapidez con la que un alimento eleva el nivel de glucosa en la sangre. Es decir, si un alimento tiene un índice glucémico bajo, el pico de glucosa en sangre será menor.

Esto es importante ya que también se relaciona directamente con la sensación de saciedad. Además, es de gran relevancia en personas diabéticas que, como hemos mencionado antes, tienen una enfermedad asociada al sobrepeso.

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Optimiza la dieta para perder peso sin pasar hambre

Perder peso sin pasar hambre es posible. Para hacerlo de manera correcta, lo ideal es consultar siempre con un nutricionista o un médico. Además, las dietas deben combinarse con ejercicio y plantearse como un estilo de vida, no como algo ocasional.

Cualquier dieta equilibrada debe incorporar fruta y verdura. También es esencial beber suficiente agua, en torno a 1,5 y 2 litros diarios. Para elaborar una dieta se deben tener en cuenta los índices calóricos de los alimentos y la saciedad que pueden aportar.