6 tips de belleza para pieles con acné

El acné es una condición que se presenta debido a la obstrucción de los poros de la piel por acumulación de grasa y células muertas, lo que suele ocasionar la aparición de los molestos y, a veces dolorosos, granos o puntos negros.

Hoy en día, existen varias formas para tratar el acné. Sin embargo, la elección entre un tratamiento u otro depende de cada caso y requiere de mucha paciencia y constancia. Por ello, es fundamental consultar al dermatólogo y seguir sus indicaciones.

De igual forma, es conveniente conocer más sobre esta condición de la piel y algunos tips que contribuyen a reducir su aparición. En el siguiente espacio detallamos más al respecto.

¿Qué causa el acné?

Esta condición se presenta, usualmente, en la zona T del rostro (frente, nariz y mentón), la espalda, los hombros y el pecho. Esto de debe a que en esas zonas del cuerpo es donde hay mayor producción de grasa, debido a la concentración de glándulas sebáceas.

Ahora bien, hay muchos mitos en cuanto a la aparición y el tratamiento del acné, pero es muy importante conocer qué lo podría originar y en qué momento se debería consultar a un dermatólogo.

De acuerdo con la sección Atención al Paciente e Información Médica de la página de la Clínica Mayo, estos son los cuatro factores principales de la aparición del acné:

• Producción excesiva de grasa.
• Obstrucción de los folículos pilosos.
• Bacterias.
• Exceso de actividad de un tipo de hormona.

A continuación, te mostramos estos tips de belleza que podrían ayudarte a mejorar esta condición.

Tips de belleza para pieles con acné

1. Exfolia tu piel

La exfoliación es un proceso mediante el cual se remueven las células muertas, e impurezas de la piel. Además, también ayuda a la limpieza de los poros para reducir su obstrucción. Por lo anterior, su aplicación regular, no más de dos veces a la semana, ayuda a mantener el cutis suave, menos grasoso y con menos tendencia al acné.

Aunque no hay investigaciones concluyentes al respecto, en la cultura popular se usan diferentes ingredientes como el azúcar moreno, la avena o el café para lograr una exfoliación natural.

Usualmente, estos productos se combinan con miel, o la crema facial de uso diario. El proceso se realiza haciendo masajes suaves en el rostro, por unos minutos, y luego se enjuaga la mezcla.

No obstante, como lo sugiere la Asociación Americana de la Academia de Dermatología a través de su blog, es importante hacerlo con cuidado, teniendo en cuenta el tipo de piel, para evitar posibles daños. Si observas una reacción desfavorable, evita su uso y consulta al profesional para evaluar otras opciones.

2. Usa una mascarilla a base de miel

Desde la antigüedad la miel ha sido usada no solo por ser un endulzante natural, sino por sus propiedades. De hecho, hoy en día es el ingrediente principal de varios tratamientos de belleza, tanto para la piel como para el cabello.

En lo que respecta a la piel, un estudio de Central Asian Journal of Global Health señala que la miel tiene actividad antimicrobiana y, por tanto, parece tener un efecto beneficioso en el control del crecimiento de varios microbios que afectan la piel.

De este modo, puede ser un buen coadyuvante contra el acné y para disminuir el riesgo de infecciones sobre heridas.

3. Prepara una loción hidratante de aloe vera y aceite de coco

Las personas que tienen acné saben lo complicado que es encontrar una loción hidratante adecuada para su tipo de piel. El problema radica en que se deben evitar los productos oleosos pero, a la vez, hay que mantener la hidratación. 

En pocas palabras, la loción debe tener una textura ligera y que, por sus componentes, sea capaz de regular la producción de grasa.

El aloe vera es una planta que produce una sustancia transparente de consistencia viscosa, y ha sido utilizada por años por sus propiedades. De hecho, un estudio publicado en Edizione Minerva Medica sugiere que su uso en la piel contribuye al manejo de heridas e inflamaciones.

Por su parte, el aceite de coco, como lo señala un estudio publicado en Journal of Traditional and Complementary Medicine, parece tener efectos positivos en el tratamiento de ciertas afecciones de la piel gracias a su actividad antiinflamatoria.

Ingredientes

• Una rama de aloe vera.
• Una cucharada de aceite de coco (20 g).

Preparación de la loción

• Corta un pedazo de la rama de aloe vera. Te recomendamos que sea de la parte más ancha para así obtener más gel.
• Remueve la cáscara y, después, corta con un cuchillo o raspa con una cuchara la parte de adentro donde se encuentra el cristal.
• En una taza no muy grande mezcla la cucharada de aceite de coco y el gel del aloe vera.

Para usar de manera adecuada esta loción, cabe señalar que, en pieles más grasas, se debe añadir una mayor cantidad de aloe vera, y en pieles secas será mejor aumentar la cantidad de aceite de coco.

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4. Haz una mascarilla de arcilla verde

La arcilla se ha utilizado desde hace muchos años por sus beneficios medicinales y estéticos y, según lo plantea un estudio de International Geology Review:

Tiene componentes que pueden servir como coadyuvantes en la regulación de grasa y la limpieza de secreciones y agentes contaminantes que se quedan en la piel.

Esto se debe a su fácil absorción y su interesante aporte de minerales.

Ingredientes

• 2 cucharadas de arcilla verde (30 g).
• 1/2 taza de agua (100 g).

preparación de la mascarilla

• Mezcla la arcilla verde con agua hasta conseguir una textura adecuada; sin que gotee ni esté demasiado espesa.
• Puedes dejarla actuar por 15 minutos o, si tienes piel grasa, hasta que se seque del todo.
• Puedes utilizar esta mascarilla dos veces a la semana.

5. Prueba el aceite de árbol de té

El aceite esencial de árbol de té es un producto natural muy popular para combatir el acné, ya que se cree que puede ayudar a prevenir la sobreinfección y a secar los granos con mayor rapidez.

Un estudio publicado en American Society for Microbilogy sugiere que este aceite puede ser beneficioso para tratar problemas de la piel debido a sus propiedades antiinflamatorias y su actividad para combatir ciertas bacterias ciertas bacterias, como estafilococos y micrococos de la piel comensal, Enterococcus faecalis y Pseudomonas aeruginosa.

Recuerda que los aceites esenciales pueden ser irritantes si se aplican en su forma natural. Para evitar esto, combina 2 o 3 gotas del aceite en una cucharada de aceite de coco u oliva, que son aceites portadores.

Ingredientes

• 3 gotas de aceite de árbol de té.
• 1 cucharada de aceite de oliva o de coco (20 g).

Preparación

• Mezcla el aceite de oliva o coco con las gotas de aceite de árbol de té.
• Para aplicarlo, utiliza un bastoncillo o hisopo sobre el área afectada.
• Asegúrate de evitar el contacto con el contorno de los ojos y otras zonas que se puedan irritar.

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6. Aplica té verde

El té verde es una bebida muy popular por sus propiedades medicinales. Sin embargo no hay evidencias que demuestren su efectividad, en forma de infusión, respecto al acné.

Pese a esto, una investigación publicada en Journal of Investigative Dermatology señala que su uso tópico contribuye a reducir la producción de grasa y combatir la inflamación en personas con problemas de acné.

Si bien faltan más estudios, se considera una opción segura para la mayoría de las personas. Simplemente, asegúrate de aplicarlo en las áreas afectadas, por la noche, antes de ir a dormir. Deja que repose 10 minutos y enjuaga con abundante agua.

Consejos finales para el tratamiento del acné

Para combatir el acné no solo hay que recurrir a los tips que te comentamos anteriormente, también debes poner en práctica las indicaciones que te dé tu dermatólogo, en relación al tratamiento. 

Por otra parte, no está de más que consultes con tu médico antes de comenzar a incorporar algún producto de belleza natural a tu rutina de cuidado.