Jun 30, 2020 Salud
La quimioterapia, como seguramente ya sabes, es una de las modalidades terapéuticas más empleadas en el tratamiento del cáncer. Engloba una gran variedad de fármacos, por lo que son muchos los tipos de quimioterapia que están disponibles.
El objetivo de este tipo de tratamiento es destruir las células cancerígenas con el fin de lograr la reducción de la enfermedad. Sin embargo, todavía no existen tipos de quimioterapia que solamente afecten a las células cancerígenas, por lo que también dañan muchas estructuras sanas, provocando fuertes efectos adversos.
Veamos, a lo largo de este artículo, los diferentes tipos de quimioterapia que existen y sus características principales.
Agentes alquilantes
Los agentes alquilantes alcanzan su mayor nivel de actividad durante la fase de reposo celular y no son específicos al ciclo de la célula. A su vez, hay diferentes tipos que se utilizan en los tratamientos de quimioterapia:
- Derivados del gas mostaza: la ciclofosfamida, por ejemplo.
- Etileniminas: hexametilmelamina es uno de ellos.
- Hidrazinas y triazinas: altretamina y procarbazina, entre otras.
- Nitrosureas: son únicas debido a que, a diferencia de la mayoría de los tipos de tratamiento de quimioterapia, éstas pueden atravesar la barrera hematoencefálica, que es la membrana que protege al cerebro. Es por ello por lo que pueden ser útiles en el tratamiento de tumores cerebrales.
- Sales de metal.
Alcaloides vegetales
Se trata de un tipo de quimioterapia que proviene de determinadas plantas. Por ejemplo, los alcaloides de la vinca se producen a partir de la vinca rosea o Catharanthus rosea. Dentro de este grupo también se incluyen a los taxanos, cuyo origen es el árbol tejo del Pacífico.
Todos los medicamentos quimioterápicos alcaloides vegetales son, al contrario que el grupo anterior, específicos del ciclo celular. Esto quiere decir que atacan a las células dependiendo de la fase de división en la que se encuentren. Además de los alcaloides de la vinca y los taxanos, también pertenecen a este grupo las podofilotoxinas y los análogos de la camptotecina.
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Antibióticos antitumorales
Este es otro de los tipos de quimioterapia que provienen de sustancias naturales. En este caso, su origen no es vegetal, sino que estos principios los sintetiza el hongo Stretomyces.
Los antibióticos antitumorales ejercen su efecto en las células cancerosas en diferentes fases del ciclo celular, no en un momento específico como ocurría con los anteriores. Veamos algunas de las formas de presentación más frecuentes:
- Antraciclinas: como por ejemplo la doxorrubicina o la epirubicina. Estos medicamentos tienen efectos cardiotóxicos a largo plazo.
- Cromomicinas: dactinomicina, por ejemplo.
- Mitomicina.
- Bleomicina.
Antimetabolitos
Los antimetabolitos son un tipo de quimioterapia muy parecida a las moléculas naturales que se encuentran en las células del organismo. De esta forma, al incorporarse al metabolismo celular, pasan desapercibidas y consiguen bloquear la división celular.
Los antimetabolitos se clasifican en función de las sustancias con la que interfieren:
- Antagonista del ácido fólico: el metotrexato.
- Antagonistas de la pirimidina: 5-fluoruracil o capecitabina.
- Antagonistas de las purinas: 6-mercaptopurina.
- Inhibidores de la adenosina deaminasa: cladribina, fludarabina, nelarabina y pentostatina.
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Inhibidores de las topoisomerasas
Son unos medicamentos que deben su efecto a la capacidad que tienen de interferir en la acción de las enzimas topoisomeresas (tanto la I como la II). Estas enzimas son las encargadas de manipular la estructura del ADN que es necesaria para la replicación. Algunos de estos fármacos son el irinotecán o la etoposida.
Antineoplásicos misceláneos
Tal y como indica el nombre de este grupo, se trata de quimioterápicos que no pertenecen a ningún otro grupo, ya que son únicos. Entre ellos podemos encontrar:
- Mitotano.
- Asparaginasa y pegaspargasa.
- Estramustina.
- Retinoides.
Conclusión
Además de la quimioterapia, existen muchos otros tipos de terapias químicas para el cáncer, como las terapias dirigidas, la imnunoterapia o la terapia hormonal. Gracias a todos estos agentes terapéuticos se han podido dar grandes pasos en el tratamiento contra el cáncer.
No obstante, todavía es muy grande el reto que tenemos por delante y es necesario seguir investigando en esta área terapéutica. El objetivo final es lograr tipos de quimioterapia que sean altamente específicos, atacando en baja medida las células propias, pero efectivamente las células tumorales.
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