4 formas efectivas de relajarse al llegar a casa

El cuerpo necesita relajarse, para ello existen muchos procedimientos y tratamientos muy sencillos de realizar.

El estrés, la ansiedad y los nervios endurecen los músculos de nuestro cuello y hombros. Las obligaciones de cada día nos suelen pasar factura, tanto a nivel físico como a nivel mental.

Es pues, imprescindible, que aprendamos a relajarnos, a “quitarnos peso”. Te lo explicamos.

La necesidad de relajarse y descansar

Cuando llegas a casa tienes muchas otras obligaciones: los niños, la casa, además de organizar el trabajo para el día siguiente.

Es difícil, sin duda, pero hemos de tener en cuenta que si “no descargamos”, si no encontramos aunque sea una hora para nosotros mismos, todo esto va a hacer que se acumulen aún más tensiones.

Tensiones que día a día, semana a semana, van a traducirse en problemas reales que nos tocará tratar.

• Sobrecargas musculares.
• Contracturas.
• Un exceso de estrés en nuestro organismo que puede traducirse en patologías como la hipertensión u otros problemas cardiovasculares.
• Sin contar, claro está, en la sensación de no disfrutar de nuestro tiempo.

Las sobrecargas físicas y además mentales son un riesgo para nuestra salud. De ahí que para evitar cualquier posible problema a largo plazo, debamos propiciar un cambio.

1. Aprender a relajarse
2. Establecer pautas de descanso para nosotros mismos. En ocasiones, basta solo con dos horas al día.

5 modos sencillos de descansar en casa

1. Cómo mejorar tu circulación y respiración

Este sencillo ejercicio requiere solamente que dispongas de veinte minutos. Cuando llegues a casa lo primero que deberás hacer es descalzarte, además de ponerte ropa cómoda.

Imprescindible también que dejes a un lado tus problemas y tus presiones del día. Lo ideal es establecer una clara separación entre el trabajo y el hogar.

1. Ahora lo que haremos es sentarnos en el sofá, si puedes tumbarte mucho mejor.
2. Seguidamente, hemos de poner nuestras piernas en alto, que queden unos dos palmos más elevadas que el cuerpo.
3. Pon la mano derecha sobre tu pecho y siente poco a poco tu respiración, siente cómo se hincha, para después dejar ir el aire por la boca.

Es muy fácil. ¿Qué conseguimos con este sencillo ejercicio? Acompasar nuestra respiración, normalizando los latidos, a la vez que ayudamos a descansar las piernas y a que la sangre fluya de modo más adecuado.

No  lo olvides, es una forma muy efectiva para relajarse.

Ver también: 5 aceites aromáticos para relajarte después del trabajo

2. Infusión relajante

Te sentimos las piernas pesadas, los pies hinchados, puede que hasta nos duela la cabeza. ¿Cómo podemos aliviar estos síntomas? Existe una infusión excelente que nos va a permitir conseguirlo.

Ingredientes

• 5  hojitas de menta.
• una cucharada de jengibre rallado (20 g).
• Tres hojas de lechuga.

Estos elementos nos van a ofrecer una sensación sedante y relajante

Preparación

1. Para prepararlo, deberás poner un vaso de agua a hervir.
2. Añade la lechuga, la menta y el jengibre.
3. Permite que llegue a ebullición, deja que repose 5 minutos y bebe poco a poco, disfrutando de la infusión.
4. Tómala cuando llegues a casa, es un modo estupendo de relajarse.

3. Un paseo de media hora

Sólo media hora, no necesitas más. Andar a paso rápido disfrutando del aire libre, de ti misma y además ejercitando tu cuerpo es un modo más que perfecto para liberar tensiones y eliminar ese estrés dañino que se almacena en nuestro organismo.

El mejor momento para salir a andar es a media tarde o por la mañana temprano, cuando no haga excesivo calor y la temperatura sea templada.

Un modo de tomarnos en serio la necesidad de salir a andar, es comprándonos unas zapatillas adecuadas con las que el pie vaya bien sujeto, y también una ropa cómoda que nos ofrezca facilidad de movimiento.

Si caminas acompañada de una amiga o incluso de tu pareja, será mucho mejor. Pero recuerda, salir a andar media hora:

• Quema tensiones.
• Libera la mente.
• Cuida de nuestra salud cardiovascular.
• Se alza como una forma sana y básica de relajarse.

4. ¿Qué tal si terminamos el día con un baño relajante?

Hemos llegado del trabajo, hemos atendido a los niños, hemos terminado de cenar y nos disponemos ya a ir a la cama ¿qué puede haber mejor que un baño relajante? Es maravilloso.

Por la noche es muy adecuado un baño caliente. Recuerda que realizar un pequeño masaje con aceite esencial de romero puede ayudarte a relajarte.

• El romero mejora tu circulación y ejerce un efecto sedante que va a cuidar y relajar tus músculos, ayudándote a descansar mejor.
• Recuerda también que los masajes deben ser de abajo hacia arriba. Por ejemplo, ve ejerciendo presión desde tus tobillos hasta tus rodillas, de tus rodillas hasta tus músculos.
• Un agradable baño de media hora y terminarás el día de la mejor forma, no lo dudes.

Relajarse es parte de una necesidad esencial de nuestra mente y también de nuestro cuerpo, escúchate tú mismo y cuídate. Merece la pena.